¿Qué es la terapia neural?
La terapia neural es un enfoque de medicina alternativa que se utiliza para tratar diversas condiciones y enfermedades. Fue desarrollada por los médicos alemanes Ferdinand y Walter Huneke en la década de 1940. Esta terapia se basa en la idea de que ciertos puntos del cuerpo, conocidos como “campos interferentes” o “focos de interferencia”, pueden causar disfunciones y bloqueos en el sistema nervioso, lo que a su vez puede contribuir al desarrollo de enfermedades.
Los tratamientos de nutrición y control de peso se basan en técnicas de acupuntura, auriculoterapia y herbolaria y proprocionan al paciente herramientas que le ayudarán a reaprender y modificar hábitos alimenticios de acuerdo a sus requerimientos nutricionales y necesidades clínicas.
La terapia neural consiste en la inyección de anestésicos locales, como la procaína, en estos puntos de interferencia. Se cree que estas inyecciones pueden ayudar a desactivar los bloqueos y restaurar el equilibrio en el sistema nervioso, permitiendo así que el cuerpo se cure de manera natural.
La terapia neural se utiliza comúnmente para tratar el dolor crónico, trastornos musculoesqueléticos, enfermedades autoinmunes, trastornos del sistema nervioso, trastornos del sistema circulatorio y muchos otros problemas de salud. Se considera una terapia holística, ya que busca abordar las causas subyacentes de las enfermedades y promover la autorregulación y autocuración del cuerpo.
*Un desequilibrio es un síntoma que de no ser atendido, pueden derivar en un padecimiento o enfermedad. Atenderlo y resolverlo es mucho más sencillo que cuando ya se ha manifestado como enfermedad.
Más que privarte de alimentos, haciendo dietas rigurosas que pueden tener efectos adversos e incluso aumentar el peso corporal, adquirirás herramientas para aprender a comer de forma saludable y práctica así como modificar hábitos con supervisión y seguimiento clínicos.
Beneficios
Terapia neural
Recomendaciones para antes de una sesión
Modelo de Atención
El método de diagnóstico se realiza en tres etapas:
Gracias a este sistema de diagnóstico es posible diseñar un tratamiento efectivo, medible y preciso o incluso conocer los casos en los que la acupuntura no podrá ayudar al paciente.
Evaluación clínica del paciente. Consiste en la revisión de la historia clínica y familiar, la exploración de síntomas, la identificación de factores de riesgo y enfermedades derivadas. Además se apoya con análisis de laboratorio rutinarios de orina y sangre o específicos que pueda requerir cada paciente. Gráfica Ryodoraku. Con el neurómetro Ryodoraku se realizan mediciones de la carga eléctrica presente en los puntos de acupuntura representativos de cada meridiano, de los cuales se obtiene la gráfica que analiza los 12 canales. Teorías de los 5 elementos y el Yin Yang de la Medicina Tradicional China. Consiste en la observación facial, la audición de la voz, la exploración de síntomas, toma de los pulsos radiales y el diagnóstico de lengua.
Con base en la historia clínica, la gráfica Ryodoraku, las técnicas de diagnóstico de la Medicina Tradicional China y los análisis de laboratorio, se define un tratamiento específico y personalizado para cada paciente y se determina el número de sesiones aproximadas para completar el tratamiento.
El tratamiento establecido, puede incluir, además de la acupuntura Ryodoraku, una o más técnicas de Medicina Tradicional China como electroacupuntura, moxibustión, terapia con ventosas, magnetoterapia, herbolaria y nutrición, entre otras.
El tratamiento curativo se realiza bajo un enfoque holístico atendiendo de forma integral no sólo los síntomas de desquilibrio sino todos los aspectos clínicos identificados, controla factores de riesgo y proporciona al paciente una mejoría en su calidad de vida.
Algunos ejemplos de padecimientos o enfermedades para los que este tratamiento es muy efectivo son:
Control y manejo de estrés y ansiedad. Gastritis y problemas digestivos, metabólicos o de sueño. Hipertensión reactiva Entre otros.
El monitoreo y progreso del tratamiento se realiza en tres etapas:
Entrevista clínica de seguimiento. Al inicio de cada sesión se realiza una entrevista clínica de seguimiento y evaluación del progreso del tratamiento, en función de cambios o síntomas que haya experimentado el paciente entre una sesión y otra. Esto es importante para determinar si se requieren cambios o ajustes en el tratamiento y para dar indicaciones clínicas específicas que el paciente tiene que llevar a cabo si es necesario. Gráfica Ryodoraku. El monitoreo y progreso del tratamiento se basa en las mediciones de la respuesta electroconductiva del fenómeno bioeléctrico cutáneo (Fenómeno Ryodoraku) realizadas con el neurómetro y de las cuáles se obtiene la gráfica Ryodoraku. Estas mediciones se realizan al menos cada 4 sesiones (o con mayor frecuencia si se considera necesario) y permiten analizar y evaluar con precisión la efectividad del tratamiento. Alta del paciente. Con base en los datos clínicos de las entrevistas, la gráfica Ryodoraku, el testimonio del paciente y nuevos estudios de laboratorio (se solicitan, solo en los casos clínicos que así lo requieren) se programará el alta y finalización del Tratamiento Preventivo y se darán indicaciones y recomendaciones al paciente sobre lo que debe y puede hacer para mantener el estado de mejoría y bienestar alcanzado.